Nuestros vecinos portugueses constituyen un tesoro inagotable. Y casi siempre inesperado, porque transitan por caminos que aquí resultarían suicidas. Danças Ocultas es un cuarteto de acordeones que compone su propio material y suena camerístico, espontáneo, equívocamente sencillo. Esta pequeña maravilla se grabó en directo, a caballo entre Oporto y Lisboa, y retrata a los cuatro acordeonistas arropados por una orquesta filarmónica de 24 efectivos y algunos de los artistas portugueses más internacionales e inspiradores. Sobre todo Rodrigo Leâo, pionero e instigador de tantas cosas suculentas. Este álbum, a día de hoy, seguramente no fuera posible en España. Mientras acontece nuestra particular revolución de los acordes, tomémoselo prestado a estos socios ibéricos tan estimulantes.