Hay pocos tipos que escriban ahora mismo como Taylor Goldsmith. Corrijamos: casi ninguno. Este Passwords, sexta entrega de sus Dawes, puede que sirva como cénit de una trayectoria atractivísima, de un repertorio que siempre aspira a la vigencia atemporal, a una validez que trasciende el aquí y ahora. La única excepción puede que sea en esta ocasión el tema inaugural, Living in the future, que remite de inmediato al rock adulto de los años ochenta con su integración de guitarras turbias y sintetizadores indisimulados.
El timbre vocal de Goldsmith puede recordar a ratos al de Don Henley, batería de los Eagles, y en ese tema parece producido por Bruce Hornsby, que también nos viene a la cabeza en la etérea introducción de teclados para uno de los cortes más fabulosos, Crack the case. Tampoco nos extrañaría que Feed the fire hubiera sido registrada en el mismo lugar y época que Roll with it (Steve Winwood), pero el productor resulta ser un genio larguirucho que en aquellos ochenta levantaba pocos palmos y vestiría de corto, el californiano Jonathan Wilson.
Es, en efecto, esa gran tradición de la Costa Oeste la que prevalece en el trabajo, sobre todo en la segunda mitad: a partir de la fabulosa My greatest invention, una de las mejores canciones del año, no hay margen para la medianía. Solo estribillos con poso, construcción milimétrica, belleza serena y grave. Esta gente sabe lo que se hace. Una vez más. Y seguramente más que nunca. Guardar el secreto sería demasiado egoísta.