FERNANDO NEIRA

Hola, me llamo Fernando Neira y #UnDiscoAlDía es un proyecto personal, un feliz o infeliz accidente, un empecinamiento. Toda mi familia proviene de Guitiriz (Lugo), aunque a mí ya me nacieron en Madrid, qué se le va a hacer. Y aquí seguimos. Sin una sola bandera en casa, ni siquiera la de mi equipo favorito, que tampoco viene al caso. Sin carnets, más allá de los que imponga la legislación vigente. Y enamorado de la música popular desde donde me alcanza la memoria. Que debió de ser, por lo que contaban mis padres, antes de que me salieran los dientes: supuestamente canturreaba Tus manos en mi cintura, de Adamo, cuando aún no articulaba más allá de cuatro palabras.

Soy periodista cultural y tengo la suerte de colaborar con el diario EL PAÍS (el mismo que leía de pequeñajo) desde octubre de 1995. Antes había dado mis primeros pasitos en el ABC, donde me echaron el lazo para la sección de Pueblos pero acabé infiltrándome en la de Espectáculos (debuté con una crítica de un concierto de Philip Glass, una noche que me dolía terriblemente una muela; y aquello no contribuyó a aliviarlo), y en un periódico de vida accidentada y efímera que se llamaba La Información de Madrid. También en la Cadena Rato, que estaba ubicada en Getafe y donde tan pronto me veía conduciendo un programa de participación ciudadana con el alcalde de la ciudad como me dejaban poner mis discos favoritos los sábados por la tarde. Aquel programa se llamaba Diapasión, un nombre que entonces tenía por un juego de palabras ingeniosísimo. Luego descubrí que también se le había ocurrido a Fátima Mirada, a Juan Gómez Chicuelo y a los promotores del festival internacional de guitarra de Palencia, sospecho que entre otros cuantos.

Me he dedicado casi siempre a escribir sobre música, aunque en estos trienios haya dado tiempo también a casi todo: política, infraestructuras (soy metrero, lo admito), educación, ayuntamientos, literatura de viajes (mi gran pasión pendiente), gastronomía. Incluso alguna crónica de fútbol en divisiones inferiores, Dios nos lo sepa perdonar. También he escrito para Rolling Stone, Paisajes (qué bonita era esa revista de Renfe), La mirada, Dominical, el Pleamar de Canarias 7, Cinemanía, Revista 40, Efe Eme y algún otro sitio que mi mala cabeza no acierta a recordar ahora mismo. Fui jefe de prensa de la SGAE, cuando aquello todavía no era un deporte de alto riesgo, y ejerzo en la actualidad como director de Comunicación de AISGE y la Fundación AISGE, lo que me permite aprender algo de cine y de televisión, aunque se me dé solo regular memorizar los nombres de todos los actores y actrices españoles de nuevo cuño. Supongo que mi procesador mental, que se remonta a la era analógica, anda ya algo escaso de memoria RAM.

Ah, y también me han llamado de alguna universidad y he impartido cursos de Periodismo Musical y Cultural en San Salvador (2017) y en Bogotá (2018), por una serie de azares y casualidades afortunados, lo que me ha permitido enamorarme de la cultura latinoamericana aún más de lo que ya venía enamorado desde las viejas tierras ibéricas. La vida misma, ya lo decíamos, es puro azar. Como esta página. Disfrutémosla, mientras dure, en la medida de lo posible. Ojalá que al máximo.

:: Pic by Luis Frutos ::