Bienvenidos a uno de los álbumes más encantadores de la temporada. Como suena. “Siesta” es una experiencia tan deliciosa como las evocaciones que sugiere su propio título; una sesión plácida pero sustanciosa: los amantes de lo inane habrán de buscar en otro lugar. Hater son unos jovencitos suecos que habían debutado el año pasado con “You tried” y presentan esta segunda entrega como la banda sonora para un radiante verano que finaliza con ruptura sentimental; por aquello de que la felicidad, en términos creativos, siempre es más seductora si la salpimentamos con matices ácidos o amargos. Y de todo ello tiene buena culpa la voz dulce pero vulnerable de Caroline Landahl, una cabeza de filas con la que los de Malmo se convierten seguramente en el cuarteto más prometedor de Suecia desde que la década pasada nos sedujeran The Concretes, a los que Hater recuerdan hasta casi la emulación (ojo: Belle and Sebastian también vienen a la cabeza). “Siesta” oscila entre el “indie” y el “dream pop”, pero es, ante todo, un caramelo para los oídos. Basta con escuchar “It’s so easy” para enamorarse al instante, aunque la experiencia aún es más enriquecedora si le agregamos el saxo que colorea “I wish I gave you more time because I love you”, nuevo refrendo a la teoría de que un gran título solo puedo encerrar una gran canción. Añadamos la nostalgia de, por ejemplo, “Cut me loose” y la producción de Joakim Lindberg, de quien teníamos noticias a través de los estupendos Hey Elbow, y dejémonos embaucar por la sonrisa algo languidecida de estos rubitos. Gente generosa, por cierto: esta entrega, de 14 temas, acaricia la hora de duración.