En alguna ocasión habré comentado aquí mi desafección por el formato EP, esa especie de coitus interruptus, de medio menú, de velada romántica sin revolcón. Un sí pero no. Pero estas cinco canciones escuetas merecen no solo otras tantas que las acompañen pronto, sino también difusión, visibilidad. Hache Milton es el nuevo sosias artístico de Héctor del Barrio, auténtico Guadiana de la música (Carlo Coupé, Látigos Calientes…), trabajador madrileño del sector cultural, lobo solitario (o casi) que en directo se añade el nombre de Los Ausentes ante la falta de respaldo; si acaso el de Gonzalo Maestre, percusionista fino y delicado, y dueño además de unas segundas voces preciosas. El mejor ejemplo de esta nueva fórmula lo constituye “Esa angustia”, que exhibe unas acústicas preciosas y la agridulce sensación de que esta vida es lo mejor que conoceremos. Hay en el toque campestre del álbum, en particular en la acre y malévola “No quiero ser como tú”, un cierto aroma a Erentxun/Duncan Dhu en formulación “indie”: Héctor como retratista cotidiano, observador sagaz y tipo sensible pero nada pusilánime. Un bonito homenaje paternofilial (“Jara”), en tono muy “folkie”, y los inesperados ramalazos latinos para “Si te empeñas” rematan un aperitivo que merecía, esperemos que pronto, el complemento de un plato principal y hasta un postre. Ojalá que esta casa sea preámbulo de discursos amplios y no de ausencias: conociendo a Hache, hay ahí mucho que contar.