Ya, ya sabemos que podríamos encontrar algún que otro motivo para no hablar siempre bien de Reginald Kenneth Dwight. El principal, ese puñado de trabajos cursis, inanes o irrelevantes que se le han ido acumulando en la discografía de veintimuchos años a esta parte; sospechamos que desde Leather jackets, un trabajo que, según admisión propia, nunca debió haber visto la luz. Los argumentos accesorios son más estéticos que otra cosa, pero duele comprobar que aquel tipo disparatado, sagaz, hilarante y lúcido de los primeros años setenta fue perdiendo progresivamente la batalla frente al señor lacrimógeno que hoy conocemos (y a veces parodiamos).

 

Y, con todo, Elton mola. O molaba. Muchísimo hasta 1977, un periodo fértil y muy, muy inspirado. Y ocasionalmente también después, como en este álbum de 1984 que casi nadie contempla y aquí no nos importa en absoluto reivindicar. No solo por Sad songs (Say so much), single impoluto y única pieza que ha resistido a los latigazos del olvido. También por la estupenda Passengers, que, salvando las distancias, adelantaba en dos años los paisajes luego desarrollados en Graceland, de Paul Simon (el vídeo no tiene perdón de dios, pero es divertido revisitarlo).

 

No nos quedemos ahí. Incorporemos a la lista de debilidades perfectamente confesables la de In neon, baladón redondo pero no pringoso. O Did he shoot her?, que tiene un punto pachanguero sin perder la elegancia. Y ese tema central, tan acústico e irreprochable, que hace bueno la teoría de que un gran título esconde siempre una buena canción. Y eso de Romper corazones (ya no es lo que era) encaja en la definición del epígrafe afortunado.

 

Asombra hacer la cuenta. Breaking hearts era ya el disco número 18 (has leído bien) en la trayectoria de Elton, lo que arroja una productividad casi estajanovista para un hombre cuyo elepé inaugural a efectos oficiales, Empty sky, nos sitúa en 1969. La concatenación de obras maestras la dejamos para la primera mitad de los setenta, pero este álbum a menudo orillado en las debilidades y la memoria de los fans acababa teniendo mucha chicha. Añadamos a los argumentos ya anotados los de Who wears these shoes o Slow down Georgie, que en los directos de la época debían de sonar bastante poderosos, y tendremos un elepé mucho mejor de lo que recuerdas o sospechas. Una joya semioculta en la insondable maraña discográfica de nuestro prolífico y entrañable amigo.

2 Replies to “Elton John: “Breaking hearts” (1984)”

  1. No recuerdo de qué año es ni que número hace de su discografía, pero “Too Low For Zero” me parece un discazo, Este tengo que escucharlo, gracias por tu completa y amena reseña. Cordial saludo.
    José Félix

    1. “Too low…” es justo el inmediatamente anterior, de 1983. Discazo, sobre todo al calor de dos éxitos inapelables, “I’m still standing” y “I guess that’s why they call it the blues”. Gracias por escribir, José Félix !

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